jueves, 19 de mayo de 2011

HIPERMNESIA

Hipermnesia
La hipermnesia es una rara enfermedad que muy pocas personas padecen en el mundo. El mal de esta enfermedad es que recuerdas todos los hechos de tu vida así como todas las conversaciones que has mantenido, algo así como un gran disco duro donde nada se puede borrar.
No estaría nada mal que muchos de nosotros tuviésemos un poquito de esta afección ya que ahora en mayo se celebraran las elecciones y los políticos se acercan a nosotros, cosa que solo pasa cada 4 años, para pedirnos el voto. No se cansan de hacer promesas: que si vamos a hacer 24 escaleras mecánicas, que si vamos a hacer un centro de investigación, zonas de aparcamientos, inversiones estratosféricas en tiempos de crisis y un largo etcétera.
Debido a que vivimos en la zona alta de Barcelona y hay mucho viento, esas promesas se van con él. La campaña electoral dura quince días, y por desgracia las promesas se van al día siguiente de ser elegidos, tanto de unos como de otros.
Me gustaría que todos recordásemos los cientos de cosas que los políticos han prometido al barrio y no han realizado, como por ejemplo dar salida a la calle Pedraforca, esta salida se prometió cuando Pascual Maragall era alcalde de Barcelona. Nunca se llegó a dar salida a esta calle, la L11 del metro debería tener una frecuencia de paso de 4 a 5 minutos, pero también se quedó en una simple promesa. La actual  asociación de vecinos ubicada en un barracón provisional desde el año 1995 con el acuerdo de hacer una instalación en dos años. Éstos son unos simples ejemplos pero la lista es mucho más amplia.
Ante esta situación me pregunto ¿Por qué seguimos creyendo las promesas que nos hacen? Puede ser debido a que nosotros no tenemos hipermnesia y las cosas que nos prometen realizar en el barrio las olvidamos con la misma rapidez que nuestros políticos.
Para votar a alguien se tiene que tener en cuenta lo que tienen programado hacer en el barrio, pero también lo que se programó en legislaciones anteriores y nunca se llevó a cabo. Todas aquellas promesas que cayeron en neuronas muertas de las cuales es imposible rescatar la información.
Quiero rescatar todas aquellas promesas y para ello puede que tenga que ir a la ampliación del CAP que se ha realizado recientemente y esperar a que algún facultativo me recete, espero que sin cobrar, unas pastillas para recordar. A lo mejor a todos nos vendría bien algún juego para ejercitar la memoria y que no volviese a pasar más. Tendría que seguir escribiendo este artículo que lo tenía pensado desde hace días… pero la memoria me falla y no recuerdo como seguía… 
Pluma Indiscreta

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